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¿Refrigerador comercial o residencial? Cómo elegir el adecuado para mi negocio

Gozar de los beneficios de un refrigerador comercial en tu negocio puede marcar la diferencia en la calidad de tus servicios.

Hoy en día, este tipo de equipos están hechos a la medida para cumplir con requerimientos específicos de almacenamiento, capacidad, temperatura, entre muchos otros aspectos que abordaremos más adelante y que pueden marcar la diferencia entre su uso comercial y residencial.

En este artículo te presentamos las diferencias esenciales entre un refrigerador comercial y uno residencial para que puedas tomar una mejor decisión.

 

Equipo comercial vs. residencial

Para definir el tipo de equipo adecuado para tu negocio, es importante que tomes en cuenta los siguientes tres aspectos.

 

Tamaño

El tamaño del equipo de refrigeración que elijas es lo que marca la diferencia entre uno de uso comercial a uno residencial. Puede parecer obvio, sin embargo esto es clave al momento de elegir un equipo. Ya que no será lo mismo guardar grandes cantidades de comida vs. diversos tipos de alimentos.

Uso comercial: un refrigerador de uso comercial permite almacenar más comida gracias a sus espacios de almacenamiento abierto. Lo cual lo hace más flexible y más fácil de usar.

Uso residencial: estos equipos ofrecen diversos espacios de almacenamiento al contemplar una gama más amplia de alimentos. Además, es común que cuenten con un espacio de congelador y/o una máquina para hacer hielos.

 

Apariencia

Algo que va muy de la mano con el tamaño es la apariencia del equipo, lo cual se vuelve una característica muy notable y distinta entre ambos estilos.

Uso comercial: este tipo de equipos suelen tener un aspecto más funcional gracias a que están elaborados en acero inoxidable y están diseñados para un fácil manejo.

Uso residencial: a diferencia del comercial, un refrigerador de uso residencial ofrece una gama más amplia de opciones en torno a tamaño, color o forma. Aspectos que se adaptan más en función del espacio.

 

Potencia y eficiencia

Salvaguardar la calidad de los alimentos es primordial en todo lugar, pero la potencia y la eficiencia varía dependiendo del tipo de equipo.

Uso comercial: para elegir correctamente un refrigerador para, por ejemplo, un restaurante, es importante considerar la potencia y la eficiencia. Estos aspectos, serán los que permitan conservar los alimentos a una temperatura óptima y constante.

Uso residencial: la eficiencia en un refrigerador residencial es distinta, al contar con un ciclo de enfriamiento que permite que se encienda y apague periódicamente. Esto, a diferencia del comercial, hace que la temperatura varíe y pueda comprometer el estado de los alimentos.

 

Por qué es mejor un refrigerador comercial 

Satisfacer las necesidades de tu negocio es posible si cuentas con uno, o varios, equipos de refrigeración de gran tamaño y eficiencia. Revisemos los beneficios que adquiere tu negocio al contar con un refrigerador de uso comercial, a diferencia de uno de uso residencial.

Ofrece un mejor diseño

Un refrigerador comercial, además de ofrecer un diseño más moderno, se adapta mejor a las necesidades de un restaurante o negocio de catering.

Otorga mayores niveles de energía

Este tipo de equipos ofrecen mayores niveles de energía, lo cual asegura una óptima conservación de alimentos.

Ofrece mayor resistencia

Al estar elaborado de acero inoxidable, ofrece una resistencia a la corrosión mayor a la de un refrigerador residencial.

Brinda una alta capacidad de almacenamiento

Un equipo comercial brinda un espacio de almacenamiento mucho mayor al de un refrigerador residencial, dando cabida a satisfacer la demanda de cientos de miles de clientes.

Proporciona un mejor rendimiento del compresor

Contar con un buen funcionamiento del compresor asegura un óptimo aislamiento durante la pérdida de calor. Salvaguardando así la calidad de los alimentos que están en el interior del equipo.

Ofrece un mejor sistema de seguridad

Los equipos de uso comercial ya suelen contar con una alarma que notifica en caso de que la temperatura sea inadecuada o una puerta se abra. Cuidando así que los alimentos en el interior no se dañen.

 

Además de estas diferencias y características es importante tomar en cuenta que los equipos de uso comercial están hechos de materiales que evitan en mayor medida la formación de bacterias. Una gran ventaja sobre aquellos de uso residenciales en términos de salud y seguridad, especialmente para los negocios que enfocan sus servicios en conservar y manipular alimentos.

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